¿Cómo se conduce un coche automático?

Las personas, sobre todo en la ciudad, cada día necesitan más la comodidad y la sencillez, optando por todo proceso automatizado. A la hora de escoger un vehículo sucede lo mismo, inclinándose por aquel que no exija mayor esfuerzo para conducir, por eso en Renting Credit  te enseñamos cómo se conduce un coche automático: paso a paso.

Olvídate de las palancas y las velocidades, esas dificultades quedaron atrás con los coches automáticos, ahora solo debes tomar el control del volante y verás lo fácil que resulta desplazarte por la ciudad.

¿Qué es un coche automático?

Empecemos por el principio, para lo cual, debes conocer qué es un coche automático. Su definición es muy simple ya que es aquel vehículo donde el conductor no tiene que controlar una caja de cambios, porque al aumentar la velocidad, el cambio de marchas las hace el vehículo de forma automática.

Estos vehículos no traen caja de cambios para que tú las cambies tal cual como en el resto de coches, y también el conjunto de pedales es más simple porque no trae embrague. Es decir, literalmente en dos pasos del pie derecho consigues controlar la marcha y la frenada. 

Aprende cómo se conduce un coche automático    

Los coches sin caja de cambios para las velocidades, sin duda, son más fáciles de conducir; el conductor no tiene que pensar, ni preocuparse por el cambio de marchas y se puede concentrar exclusivamente en la carretera, evitando un poco más los peligros que puedan aparecer como es el de chocar contra otro vehículo, los peatones u otras distracciones. 

No tienes que pisar el embrague para cambiar de velocidad, sino que puedes concentrarte en lo básico de frenar cuando se necesite y acelerar cuando lo desees y puedas. Esta simplicidad puede ser una desventaja si nunca has conducido con una transmisión automática. 

Por eso, es necesario que antes de lanzarte a la calle en un vehículo automático, aprendas el paso a paso de sus reglas y herramientas. 

Pasos para arrancar el coche automático

Lo primero que debes hacer es ajustar la posición del asiento y del volante donde te sientas cómodo y alcances los dos pedales con tu pie derecho, al igual que puedas ver la punta delantera del vehículo.

Mantén las extremidades ligeramente dobladas, asegurándote de alcanzar el pedal del freno cuando está pisado a fondo.

Familiarízate con la posición de la palanca de cambios automáticos, la cual generalmente solo tienen cuatro comandos: Aparcamiento o (P), la cual suele activarse pulsando un botón y requiere que hundas el pedal del freno. También está la (N) o “punto muerto” para soltar y dejar libre el vehículo, es decir sin marcha indicada, puedes arrancar con la (D) que significa Impulso hacia delante y la (R) que significa retroceso.  

¿Te das cuenta lo simple que resulta controlar un vehículo automático? solo debes preocuparte por llegar a tu destino sano y salvo. 

¿Cómo cambiar de marcha en tu coche automático?

Después de conocer el significado de las cuatro posiciones básicas de la palanca que controla el vehículo automático, te será mucho más fácil cambiar de marcha. 

Literalmente ya sabes que (P) es parking, que en inglés significa aparcamiento. Si te vas a quedar estacionado solo pisa el freno y pon la (P), bloqueando el vehículo automáticamente. 

Para arrancar pisa el freno y coloca la palanca en la posición (N), recuerda que aquí estás soltando el vehículo para que se pueda mover libremente y poder conducir en automático. Claro, en esta posición de la palanca conduces siempre hacia delante. 

Pero, cuando quieres mover el coche hacia atrás debes pasar la palanca a la posición (R), recuerda que primero debes parar el automóvil con (P) antes de pasar a (R). 

¿Cómo utilizar los pedales del freno y del acelerador en un coche automático?

Para manejar un coche con transmisión automática sólo tienes que conocer cómo utilizar dos pedales, el del freno y el del acelerador. Para arrancar primero hay que pisar el pedal de freno y luego mover la palanca de la posición P a la posición D.

Un consejo muy importante, es utilizar los dos pedales con el pie derecho, nunca utilices ambos pies, es mejor cambiar del freno al acelerador con un mismo pie, porque si llegas a pisar en un momento de nerviosismo ambos pedales las consecuencias pueden ser catastróficas.